Difícilmente encontraremos las palabras ‘magia’ y ‘marketing’ en una misma oración. ¿La razón? Ambas parecen ser completamente opuestas, pero este concepto está por cambiar. Sabemos que la magia es un espectáculo que cautiva las emociones y vuelve real hechos que carecen totalmente de lógica humana. Por otra parte, el marketing es una profesión de estrategias, análisis, data dura y más.
Entonces, ¿cómo pueden estar relacionadas ambas? Puedes verlo desde dos puntos: eres un mercadólogo que conoce la magia de brindar una buena experiencia de usuario; o eres un mago para fiestas que cautiva a su público con trucos bien desarrollados.
Parece simple, pero es impresionante ver como la magia y el marketing han estado juntos a lo largo de la historia. Incluso, ambas han estado frente a los ojos de muchos y pocos lo han notado. Por ello, hemos recorrido la historia para demostrarte la buena relación que mantienen la magia y el marketing.
Disney: el origen de todo
A lo largo de los años muchos han intentado conectar con el público a través de la magia, pero solo uno ha logrado cautivar a grandes y pequeños: Disney. El gigante de los dibujos animados logró conectar con toda una generación y hoy, luego de más de 20 años, todavía mantiene la atención de toda una familia.
¿Cómo logró Disney llegar a tantas personas?
Estamos seguros que este logro no se dio de la noche a la mañana. Incluso, la historia nos revela que su creador, Walt Disney, tuvo diferentes fracasos antes de lograr el éxito rotundo del que hoy en día goza.
Walt Disney se esforzó en crear mundos de fantasía que entretuviesen a los espectadores y los llevaran a soñar en vivir una experiencia similar. Años más tarde, sin tener habilidad alguna como diseñador de parques, arquitectura o ingeniería, se atrevió a hacer realidad estas fantasías que plasmaba en sus historias, permitiendo a sus seguidores experimentar lo que siempre habían soñado.
Al final, toda la magia de Disney, tanto en sus historias y películas como en sus parques temáticos reside en la experiencia que ofrece a sus seguidores. Estos son cautivados con historias increíbles para luego ofrecerles la posibilidad de hacer realidad esas historias a través de sus parques temáticos.
El niño que sobrevivió
Si en algún momento viste o leíste alguna de las creaciones de J.K. Rowling, entonces sabes que estamos hablando de Harry Potter. Nunca una historia de magos tuvo tanta influencia en la vida de las personas como las aventuras de tres jóvenes que, en su afán por aprender magia, terminan salvando al mundo.
Lo que no sabemos es que cada uno de sus personajes tiene una influencia mágica que lograr captar hasta al más desinteresado en este género cinematográfico. ¿Cómo lo hace? Existen diferentes puntos que pueden analizarse para entender cómo Harry Potter atrapó durante más de 10 años a toda una generación.
Un producto de calidad
Si, Harry Potter es un producto ¡y vaya que fue bueno! Por lo general, un producto malo solo puede ser vendido hasta cierto límite ya que, al no satisfacer a los consumidores, las ventas disminuyen y todo acabará. En el caso de esta mágica historia, cada libro y película publicada traía consigo un efecto innovador que atrapaba a sus seguidores.
Conexión emocional
Para que Harry Potter lograra convertirse en un fenómeno de nivel mundial, fue necesario tocar y conectar con las emociones del público. Esto solo pudo lograrse solamente trabajando los ‘sentimientos de oro’ de sus seguidores: seguridad, estabilidad y sustentabilidad.
Recomendación boca a boca
Aunque parezca difícil de creer, la mejor publicidad es la que hacen los propios consumidores porque es mucho más efectiva y completamente gratuita. Si preguntásemos a 100 personas cómo conocieron la historia de Harry Potter, muchos de ellos te dirán que otra persona les comentó la historia y lo fantástica que era.
Hoy en día la internet amplia exponencialmente la capacidad de la recomendación boca a boca. Algo puede hacerse viral en segundos y puede gustar a muchos o ser rechazado. J.K. Rowling se dio cuenta que al permitir que sus fanáticos conversaran sobre sus libros en la internet les ayudaba en la construcción de marca y era mucho más beneficioso para ellos.
Magia y misterio
Si por algo se caracterizó Harry Potter es por dejar una brecha de incertidumbre en sus espectadores acerca de los sucesos que han de ocurrir. Esta técnica no solo la aplicaban en las películas, sino también en los trailers, filtrando información en cantidades mínimas pero precisas.
Persistencia
Una vez que Harry Potter fidelizó a sus seguidores a través de un vínculo emocional, era necesario mantener intachable esta relación. Para ello, siempre cubrieron las expectativas del público durante cada interacción. Siempre analizaron la situación antes de ejecutar nuevas iniciativas para mantenerse congruentes y fortalecer la promesa de marcas. Un ejemplo de esto fue la no inclusión del popular mago y otros personajes en la Cajita Feliz de McDonald’s.
¿Cómo hacer marketing mágico?
La historia nos muestra muchos ejemplos de personas que lograron conectar la magia y el marketing, pero, ¿cómo podemos lograr nosotros complementar ambas? Si bien no hay una receta mágica, existen tres puntos que te permitirán hacerlo.
Apunta a las emociones
En Internet encontrarás una infinidad de investigaciones que demuestran cómo los consumidores tienden a adquirir un servicio o producto en base a las emociones. La mejor forma de hacerlo no es hablando de las funcionalidades o cualidades del producto, sino mostrándoles los beneficios que involucra adquirirlo.
Conecta con el consumidor
En algún momento habrás visto el vídeo del discurso de Steve Jobs en Stanford (si no lo has visto, abajo te lo dejo), donde toca un punto clave: ‘la vida se trata de conectar puntos’. Es decir, en el marketing, la magia está en lograr que ese producto que estés promocionando vaya en consonancia con un momento de la vida diaria del consumidor.
https://youtu.be/bxk3jiqppzw
Hazte amigo del misterio
Los magos son expertos en crear incertidumbre al momento de realizar sus trucos. Esto hace que los espectadores sientan ansias de saber qué ha ocurrido en realidad durante el acto de magia. Lo mismo sucede en el marketing, siempre hay que dejarle algo a la imaginación del consumidor. Crea expectativas sobre lo que puede llegar a suceder porque eso incentiva la publicidad boca a boca.
Para finalizar, el marketing y la magia son herramientas que bien aplicadas, pueden darle a tu emprendimiento el despegue que estás buscando.