Trabajar, es una de las actividades de mayor importancia en las personas de edad adulta. Para poder lograr independencia, es necesario contar con estabilidad económica. Esto será lo que permitirá que sea capaz de valerse por sí mismo. Pero una vez que se plantea que ya es el momento de empezar a buscar trabajo, empiezan las interrogantes acerca de cuáles son las opciones más convenientes para iniciarse en el mundo laboral.
A primera instancia, hay que recordar que para trabajar, es necesario estar integrado a un ambiente agradable. Esto permitirá facilidad de desenvolvimiento de manera profesional. Estar en un lugar donde la persona no se siente a gusto, solo provoca que el rendimiento laboral decaiga. Cundo se trata de buscar el trabajo ideal, se debe tomar en cuenta las cualidades con las que se cuenta; esta será la herramienta ideal para lograr que el empleo elegido, sea el adecuado.
Analizado cuál trabajo es el que se desea, es momento de iniciar la búsqueda de oportunidades de empleo. Y para esto, será necesario elaborar un curriculum y posteriormente prepararse para la entrevista de trabajo. Dentro del curriculum, se debe ser lo más explícito posible. Lo mejor es desglosar abiertamente con cuáles habilidades se cuenta; permitirán representarte como la opción adecuada para un cargo laboral.
Cuando ya se han organizado cada uno de los elementos necesarios para solicitar un empleo, es momento de prepararse para la entrevista de trabajo. Esta se considera el paso más importante, ya que aquí será la carta de presentación del aspirante, y demostrará su interés en el cargo. Durante años, la entrevista se ha considerado una de las mejores opciones para seleccionar personal capacitado para un cargo en específico. No solo se trata de una conversación. Se centra en estudiar a la persona interesada.
La entrevista de trabajo
Cuando se habla de la entrevista de trabajo, se trata de un método de selección de personal, que se encuentra capacitado para ocupar un cargo específico en un establecimiento laboral. En el momento que se asiste a la entrevista, la persona aspirante se debe centrar en demostrar al entrevistador, que se encuentra capacitado para trabajar dentro de su compañía. La manera en que se comporte y hable, es lo que determinará si es un candidato potencial para la selección.
En el momento que se programa una cita para asistir a una entrevista de trabajo, inicia un periodo de preparación, donde la persona debe estudiar las posibles preguntas que se realizarán durante esta. La mejor opción, es contar con ayuda de alguien de confianza, que sirva de ayuda para simular la entrevista, y preparar las respuestas adecuadas que demostrarán que se poseen las habilidades necesarias para desenvolverse en el área de trabajo.
La mayoría de las entrevistas, suelen realizarse de manera individual. Pero existen casos en que las compañías deciden realizar entrevistas grupales. La intención de esta modalidad es ver como la persona reacciona ante la competencia, así como su seguridad ante la presencia de otros.
Una vez que ya se ha preparado el aspirante a nivel psicológico, no se debe olvidar la presentación personal. Lo mejor es contar con una vestimenta adecuada, que demuestre profesionalismo. Mientras más seriedad demuestre la ropa, puede llegar a causar más impacto en el entrevistador. Además, se recomienda armar un portafolio con cada uno de los papeles necesarios para la entrevista; esto demuestra organización por parte del entrevistado.
Consejos para asistir a una entrevista de trabajo
En el momento en que se te cita a una entrevista de trabajo, lo ideal es prepararse para afrontar la situación sin perder el control. En general, el solicitante se enfoca en su aspecto físico, con la intención de dar una buena impresión a primera instancia. Además, hay que centrarse en la ronda de preguntas y respuestas, que será el momento decisivo para determinar si realmente se encuentra preparado para ocupar el cargo solicitado. Pero no solo hay que enfocarse en estos dos factores. Estos son algunos de los consejos que pueden servir al momento de presentarse en una entrevista:
- Evitar responder de manera improvisada. Al ofrecer respuestas sin haberse preparado adecuadamente, es considerado un acto de poca profesionalidad. Fácilmente puede caer en confusión, y dar respuestas de poco sentido o no acertadas.
- Investiga acerca de la empresa donde deseas encontrar trabajo. No se trata de adular el nombre de la compañía, sino de conocer su funcionamiento y que de verdad te interesa pertenecer a su fuerza de trabajo.
- El lenguaje corporal y verbal deben ir de la mano. La vestimenta se recomienda que sea lo más formal posible. La elocuencia es importante, además de evitar al máximo palabras coloquiales o vulgares. En lo que respecta a los movimientos del cuerpo, es mejor encontrar maneras de relajarse, ya que los movimientos nerviosos denotan inseguridad.
- Arma un portafolio donde le permita al entrevistador conocer más a fondo tu trayectoria. Trata de llevar más de una copia del curriculum; si te enfrentas a más de un entrevistador, lo ideal es que le entregues uno de manera individual en cada ocasión.
¿Cómo afrontar los defectos en la entrevista de trabajo?
La mayoría de los aspirantes que asisten a una entrevista de trabajo, se dedican a maquillar sus defectos y engrandecer sus cualidades. Mentir es algo que se debe evitar al máximo durante el proceso de selección. Lo mejor es mostrar aquellos defectos que se pueden mejorar, y que no opacan las habilidades excepcionales del entrevistado:
- La timidez suele estar presente en muchas personas. No todos tienen la habilidad para desenvolverse fácilmente ante un público. Hablar abiertamente de esto permitirá que el entrevistador pueda planificar el entrenamiento incluyendo un proceso de superación de la timidez.
- El aspirante puede expresar que en ciertas ocasiones, no suele usar el lenguaje verbal adecuado. Usar palabras fuertes puede afectar el ambiente de trabajo, pero con preparación, el aspirante puede modificar esta conducta.
- Muchos trabajos suelen solicitar personas con experiencia. Sin embargo, se pueden presentar aspirantes recién graduados en el área, que son capaces de asumir la responsabilidad del cargo. No hay que menospreciar el conocimiento de ningún profesional.